Acepto seguirte el juego, pero siempre me quedo sin vidas. Si sonrío es que te quiero, y si te miro mal es que odio quererte. No digas que no tengo razón, porque siempre la tengo, y sino demuéstramelo.
Me encantan los besos robados, solo si se merecen. También suelo imaginar cosas que no van a ninguna parte. Adoro los imposibles porque dan sentido a la vida. Siempre muero de ganas por todo. Ahora no va a ser menos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario