Y mirarte disimuladamente, lentamente, sin que te des cuenta. Tus labios, tus ojos, tú. DISFRUTAR mientras sigues ahí, sin desaparecer como un espejismo, pensando en vete a saber que o quien.
Y me miras, te sonrío, me sonríes. SONREÍMOS juntos, con una mirada que dice mucho y a la vez nada.
Aspiro cada segundo mientras van pasando los minutos de manera veloz.
Noto que me miras, me pongo tensa y hago ver que no me di cuenta mientras miro hacia el suelo.
SIEMPRE lo mismo…
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